Una buena fotografía es, muchas veces el resultado de la
confluencia de una serie de factores en un mismo punto que dan lugar a un
momento visualmente muy interesante. Capacidad para anticiparse a los hechos,
paciencia y una buena voluntad para disparar
cuantas veces sea necesario son las claves para lograr captar ese momento decisivo.
Haz un seguimiento de la actividad, asiste a los ensayos y elabora un plan de trabajo
¿Cuál es el mejor Angulo de visión? ¿Qué objetivo emplear? ¿Debería utilizar la
ráfaga? Tenéis que determinar la exposición y todos los detalles necesarios
antes de que empiece la obra o el acto que estéis fotografiando, incluido si la
ráfaga hace demasiado ruido, no valla a molestar a los actores del teatro.
No desesperes si no logras captar ese instante a la primera,
sigue intentándolo y veras como al final lo consigues.
Y recuerda llevar siempre
contigo un zoom de medio alcance, y siempre podéis inspiraros en los grandes como
Herri Cartier-Bresson.
También es ideal practicar con fotografías de velocidad,
como coches, aviones etc.
Otra cosa diferente es si nos encontramos haciendo este tipo
de fotografías en el exterior, se ha de reaccionar sobre la marcha y hacerlo rápido,
porque la oportunidad puede esfumarse.
Procurar anticiparos a los hechos y tener en cuenta los distintos elementos que
configuran la imagen, como por ejemplo, si la persona esta sobre actuando, o
acaso hay demasiados elementos en el fondo que distraerán la posible instantánea.
Normalmente estos inconvenientes pueden solucionarse esperando a que la gente
termine de pasar o simplemente cambia el ángulo para que no estropeen la fotografía.
Intentar manejar la cámara con rapidez, incluyendo algunos parámetros
más complicados, como pueden ser las iso, o la intensidad del flash pueden en
un momento dado darnos la oportunidad de que capturemos ese instante mágico.
Saludos
